¿Y ahora cómo empiezo?

Esta es la pregunta que más me habéis hecho en los últimos días, porque la mayoría de vosotras quiere ponerse en forma lo antes posible tras las vacaciones, y tiene un objetivo cercano a la vista.

Pero el primer día de rodaje lo pasáis fatal, y creéis que no vais a poder con el plan de entrenamiento. Cuánto cuesta coger la forma y qué fácil se pierde, ¿verdad? Pues siento deciros que no hay milagros para evitar esto, y que sólo con entrenamiento volveremos a cogerla. ¡Así de bonito es este deporte!

La buena noticia es que la forma sí se vuelve a coger, y que incluso tras un descanso se puede llegar a mejorar más que antes. Os dije muchas veces que no es aconsejable mantener el cuerpo a un nivel alto durante todo el año, y que es muy bueno desconectar de vez en cuando para volver con las fuerzas renovadas y asumir los objetivos desde “cero”. Esto hace que el cuerpo descanse y pueda alcanzar un nivel superior si vuelve a entrenar correctamente.

Y no creáis que  por haber estado sin entrenar unas semanas es como si nunca hubierais entrenado (aunque ahora lo parezca). El cuerpo tiene memoria y coge la forma mucho antes que cuando empezamos.

Adaptación:

Lo que sí os aconsejo hacer es un plan de adaptación antes de seguir el entrenamiento establecido para la carrera objetivo. No podemos empezar a entrenar como si ya estuviéramos en forma, sino que hay que hacer una adaptación para llevar al cuerpo a un punto donde esté preparado para cumplir con el entrenamiento específico, con garantías de aguantarlo sin lesionarse.

¿Os he animado? ¡Espero que sí! No hay nada más bonito que empezar una nueva temporada atlética, mejorando poco a poco, pero con la ilusión de un niño, y nuestros objetivos renovados. ¡A por ellos!

Ejemplo de plan de adaptación al entrenamiento (dos semanas):

Día 1: 30 min. cc

Día 2: 40 min. cc

Día 3: 60 min. cc

Día 4: 40 min. cc

Día 5: 50 min. cc

Día 6: 60 min. cc

Fotos: Juki Fotografía