¡Hola! ¿Cómo va ese inicio de temporada? Espero que tras los ánimos que os di en el post anterior, estéis más motivadas.
Como habéis visto en las redes sociales estoy pasando unos días en Madrid, y me gustaría hablaros de algo que me ha llamado la atención. He visto a muchísima gente corriendo, cosa que hace unos años era impensable, pero que ahora vemos como normal. Lo que me ha causado gran sorpresa es ver a tanta gente trotando por un camino de asfalto, dentro de un parque o en plena Casa de Campo, justo al lado de caminos perfectos para correr. No sé qué tiene el asfalto que gusta tanto. Y sin embargo, yo lo odio. Es más, sólo entreno en él si preparo una carrera de ruta y tengo una tirada larga que no puedo hacer en su totalidad por un camino. Vale, puede que sea un poco exagerada, pero soy bastante propensa a lesionarme, y prefiero evitar terrenos tan agresivos.
Los mejores terrenos para correr
Correr es un deporte de impacto, y por tanto es muy lesivo. Doy por hecho que todas lleváis el calzado adecuado para correr, así que sólo analizaré los distintos terrenos por los que podemos entrenar.
El mejor para mí sin dudarlo es el camino de tierra, ese que se forma cuando desaparece la hierba, que es compacto y liso. El impacto en este terreno es bastante bajo, y si está muy liso se puede llegar a correr muy rápido, por lo que podemos hacer todo tipo de entrenamientos sobre él.
La hierba también me encanta. Es el terreno donde menos impacto se recibe del suelo, pero hay gente a la que no le gusta porque ralentiza mucho los ritmos y no motiva demasiado para hacer entrenamientos fuertes. Además, si está muy alta podemos cargarnos un poco la musculatura, por lo que hay que estar acostumbrado a correr sobre ella. Yo que soy atleta de cross disfruto muchísimo corriendo por un “prao” (lo siento, soy asturiana). ¡No puedo evitarlo!
Ahora hay muchas ciudades que tienen circuitos de hierba artificial alrededor de las pistas de atletismo. A mí personalmente me gusta más la hierba natural, pero es una opción también preferible al asfalto. Tenemos que tener en cuenta que si esta superficie está mojada, los ritmos de los entrenamientos serán mucho más lentos. Os lo digo por propia experiencia, que cuando la probé por primera vez, me llevé un buen disgusto con los tiempos de mis series.
Y por último en mi “ranking” de terrenos, el asfalto (el hormigón o las aceras ya no las menciono porque para mí están prohibidas). Es el terreno donde se corre más “fácil”, donde se hacen los mejores tiempos, pero también donde recibimos el mayor impacto del suelo, y por tanto el más lesivo. Es cierto que si preparamos una carrera de ruta, es recomendable entrenar en asfalto, pero no siempre, ni todos los tipos de entrenamiento. Yo correría sobre él, como mucho, dos veces por semana.
Como veis, y en resumen, los terrenos más blandos son los mejores para correr, pero con algunas limitaciones, porque también pueden sobrecargar. Lo ideal es combinar varios terrenos para acostumbrarse a ellos, y por supuesto abusar de los más blandos, para proteger nuestros músculos y articulaciones.
Dejo de lado la pista de atletismo porque casi ningún atleta popular entrena sobre ella. Para días donde no nos quede otro remedio no es mala opción, pero mejor evitarla porque es bastante dura, y mojada resbala un poquito.
¿Por dónde entrenáis vosotros? ¿No seréis de los que corren siempre por asfalto, verdad?
Fotos: Rodrigo Vallina y SportMedia
¿Y la arena de la playa? ¿cuál es tu opinión sobre su impacto en articulaciones?
A veces corro por la playa, ¡en el Mediterráneo que hace mejor clima!, y es muy agradable. No para hacer tiempos, si no para disfrutar de la compañía del mar 🙂
Gracias
La arena de la playa no tiene mucho impacto y me encanta. Lo único que hay que tener en cuenta es que no esté muy blanda, porque carga bastante. Yo la utilizo mucho en pretemporada, cuando los tiempos no importan. Además, darse un baño de agua fría tras el entrenamiento, es impagable, jeje.
La arena seca es perfecta para hacer ejercicios de técnica y fuerza.
¡Gracias por tu comentario!
Un beso,
Alba
Gracias por los detalles en la respuesta! Y siiií, oh! un baño después del entrenamiento, una gozada, sobre todo a primera hora de la mañana
otro beso
Asfalto sería la carretera? Y hormigón? El carril bici?
Si, son terrenos lesivos, recomiendo tierra o hierba Beatriz ?
El asfalto es carretera, eso es. El hormigón es aún peor… No lo recomiendo salvo causa de fuerza mayor. Con el carril bici hay que tener cuidado, porque depende de las ciudades está hecho de distintos materiales. Puedes usarlo, pero si tienes cerca un camino de tierra, mucho mejor.
¡Gracias por tu comentario!
Un beso,
Alba
Me encanta entrenar sobre el prao, es una alfombra y las sensaciones son brutales, lo malo que me toca hacerlo sola a menudo, ya que a las compis no les gusta mucho. Gracias por tus consejos.
No gusta porque es más lento, y justo en Avilés es más duro que el circuito de fuera, jeje. ¡Pero te pone muy fuerte!
¡Un beso Luz!
Intenta no entrar con el talón como en la primera foto del post. Eso es lo realmente importante para reducir el impacto (está claro que el asfalto nunca ayuda). Correr con el mediopie reduce en gran medida el impacto ademas de economizar la técnica de carrrera.
http://www.sportlife.es/correr/articulo/contactar-talon-mediopie
http://www.correrdescalzos.es/interesantes-datos-arrojados-por-un-nuevo-estudio/
¡Gracias por tu aportación! No entro tan de talón, pero estaba posando para la foto e iba despacio y corriendo distinto a como suelo hacerlo jeje. Es cierto que hay que evitar “talonar”.
Un beso,
Alba
Si es cierto que a veces las fotos engañan 😉
Un saludo